jueves, 27 de noviembre de 2014

EL RICÓN DE PILAR

Ya estábamos pensando que Pilar nos había abandonado, pero nada más lejos de la realidad. Aquí está un curso lector más y con una pequeña licencia en el anterior libro (por qué será), nos deja esta, digamos, forma tan peculiar y sorprendente, a la vez que maravillosa, de contarnos ELEGÍA.
Muchas gracias y a seguir así.


ELEGÍA     PHILIP ROTH
Descendiente de inmigrantes
Creyentes de un dios judío,
Llevaba piedras preciosas
Ocultas en los bolsillos.
El féretro en un rincón
Del ruidoso cementerio,
Rodeado de los suyos
A la tierra será devuelto.
Las caras están serias,
El está en la mente de todos,
Mientras viva en sus recuerdos
No se marchará del todo.
La intensa vida del difunto
Desfila por sus cabezas:
-Mucho fallo, y poco acierto-
En silencio se lamentan.
Su matrimonio con Cecilia
Dramático fue y turbulento,
Cuando la entrepierna grita
No se escucha al intelecto.
Los dos hijos que nacieron
De ese primer matrimonio
 Han venido a despedirlo
Por sentido del deber tan solo.
Su ex mujer, que aún hoy lo recuerda
Cruzando la bahía a nado,
Su hermano mayor que siempre
Le ha tendido su mano.
Nancy, que heredó de su madre
La tremenda gentileza,
Incapaz de mantenerse al margen
De la necesidad ajena.
 
Cuando su padre las infravaloraba
Ella obviaba sus defectos
Hacía balas de perdón
Como si fueran heno.
 
Había despojado a sus hijos
De una infancia coherente,
Y de la protección de un padre
Por su afición a las mujeres.
Demasiado furiosos de niños
Para entender la situación,
¿es perdonable su postura
De negarle aún hoy el perdón?
Nunca debieron pedirle
Que les prestara dinero,
Siguió manteniendo a su madre
E intentando acercarse a ellos.
No les hablo de sus males
Ni del peligro que corría
Para no inspirarles demasiada
Satisfacción vengativa.
El hecho de que abandonara
A su segunda familia,
Les confirmó la nefasta
Opinión que de él tenían.
Aventurero sexual
Inmaduro e irresponsable,
Impostor como marido,
Mala gente y peor padre.
Minimizaban cuanto su padre
Tenía de válido y bueno:
Generosidad, decencia..
Y agrandaban sus defectos
Ya no buscaba el afecto
De sus dos hijos mayores:
-nunca hiciste lo correcto-
Eran sus constantes reproches
Resistir a sus acusaciones
Requiere un grado de combatibilidad
que hace tiempo había desaparecido
De su más íntimo arsenal.
Cuando conoce a Phoebe
Recobra su entusiasmo,
Cuando su corazón enferma
Ella es quien está a su lado.
 
Pierde el hombre la pasión
Cuando al matrimonio llega,
La busca por otros lados
No puede vivir sin ella.
Contrata secretarias
Que con el tiempo terminan
Teniendo los gastos pagados
Y callos en las rodillas.
Con una modelo danesa
Y su agujerito oculto
Descubre un goce sin medida
Y ambos se rinden culto.
Merete inútil ante el peligro
Tiene líos con hacienda
Y problemas muy muy serios
Con el permiso de residencia.
Es con ella el erotismo
la única afinidad
Que le subyuga y anula
Su capacidad de razonar.
 
Está en París con la danesa
Cuando Phoebe le llama urgente,
Su madre está muy enferma
No llegará al día siguiente.
-Los vuelos están cancelados,
No he podido volar antes,
Espero llegar a tiempo
Para ver viva a mi madre.
 
Pierde a la madre y a la esposa
Dos mujeres tan perfectas,
Cuya  abnegación ha sido
El sostén de su fortaleza.
Phoebe le oculta sus pensamientos
Pero no se engaña a sí misma
-me hieres con la danesa
Y me humillas con la mentira-
Aunque haya violado su confianza
Es posible sobrellevar
Si se reconoce el engaño
La situación con dignidad.
La mentira es una forma
De control rastrera y baja
Cuando sobre otra persona
Buscas tener ventaja.
También puede ser un acto
De amabilidad ante una esposa
Para no herir sus sentimientos
Y calmar el llanto que le ahoga.
 
Decide desposar a Merete
Para disimular el delito,
Le pareció la mejor manera
De justificarse a sí mismo
Cambia una esposa servicial
Por otra que se desmorona
Ante la mínima presión
En un charquito se ahoga.
 
Odiaba a su hermano
Por su salud indiscutible,
Por su longevo matrimonio
Y su cuerpo sin cicatrices.
Jamás había envidiado
Sus atléticas proezas,
Su destreza en lo financiero
Su  exagerada riqueza.
En la vejez había descubierto
El estado emocional
Que priva al envidioso
De su realismo y serenidad.
 
Jubilación :
Se traslada el a la costa
Para aislarse de su hija,
Sensible a la vulnerabilidad
De un anciano egoísta.
Se golpea el corazón
Cual fanático al orar,
Le puede el remordimiento
De tanto error sin enmendar.
Para quien no da crédito
A la vida ultraterrena,
No le queda mas consuelo
Que unos huesos bajo tierra.
Quien tiene la certeza
De que dios es una mentira,
Sabe que no hay gloria eterna,
Que ésta es la única vida.
 
¿Cuánto tiempo puedes pasar
Mirando el océano y sus aguas
Aunque eso sea lo que más
Añores desde tu infancia?
Las olas que lo persiguen
Avanzan segundo a segundo,
Inexorables como la realidad
Obstinada del futuro.
 
Viven los viejos la vida
A través de de la de hijos y nietos
Que tremenda soledad sienten
Cuando los llevan con ellos
Lo que queda de la felicidad
Conyugal es tan importante
Que si no van con su pareja
Nunca hacen planes con nadie
Pero hay quien de vez en cuando
Para cenar con su esposa anciana
Desempolva el viejo smoking
Y la magia inunda la estancia
 
Impartió clases de pintura
Porque esperaba encontrar
Una mujer por la que algún día
Él se pudiera interesar.
Cuando su alumna aventajada
 Por unas pastillas lo deja,
Abandona la pintura…
Otra vuelta más de tuerca.
Ya no le satisface el dibujo
Ni la familia ni amigos,
Pero coquetear con jovencitas
Le hace sentirse más vivo.
Ve el declive de su entorno,
Su amigo, en un hospital
Para enfermos mentales
Por quererse suicidar.
¿Cómo apartarlo del abismo
Si está decidido a saltar?
Son  inútiles y banales
Las charlas para levantar
El ánimo de los que han perdido
El coraje para pelear…
Su jefe, ha muerto… y otro amigo
Con un cáncer terminal
¿Qué decir en esos trances
Cuando la negra dama acecha
Si él sabe que no hay retorno
Que no hay camino de vuelta?
Nunca se está preparado
Ni asumimos conscientemente
Que aquellos a los que queremos
Nos los arrebate la muerte.
 
Se sentía humillado hasta el punto
Que ni él mismo se reconocía,
La disminución de la virilidad
Los golpes que la vida le infligía
Iban deformando su cuerpo
Y a menudo le recordaban
-mas allá del cruel dolor
Ya no te queda nada-
Había perdido la batalla
Por permanecer invulnerable
Un almacén es hoy su cuerpo
De artilugios artificiales
Diseñados para evitar
Su derrumbe definitivo
Y retrasar lo mas posible
El encuentro con su destino
Su vida fue un paso constante
Por diversos hospitales
Hernias y peritonitis
A punto están de tumbarle
Consiguió ganar los pulsos
Que le echó su corazón
Y hoy...en la mesa del quirófano
Donde tantas batallas ganó
Repasa fallos y aciertos
Que la vida le brindó,
Hoy nadie le espera afuera
Porque a nadie le avisó
-mira atrás, dijo su padre
Y repara lo que puedas
Saca el máximo provecho
Del tiempo que aún te queda
Se sumió en la inconsciencia
Y lejos de saberse abatido
Ni condenado, sometió
Sus pensamientos más sombríos
 
Vejez…batalla implacable
Cuando estás más débil que nunca
Y eres menos capaz de invocar
Tu viejo espíritu de lucha
 
           *************
Noviembre

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario