Todo el mundo quedó sorprendido, ya no de la poesía en sí (fantástica), sino de la fabulosa interpretación que de ella hizo Damiana.
Pero la sorpresa final fue aún mayor. Ella era la autora de esa poesía y de otras que allí nos dejó. Y nos dejó asombrados y super contentos.
Así que no quedaba otra de publicar dicha poesía en la entrada de este mes.
Espero que todos podáis disfrutar de ella como lo hicimos los más de cien que lo hicimos en directo.
Y ¡como no!, mil gracias a Damiana.
BIDESUCO
Pelaje color de miel
suave como el terciopelo
con rayas atigresadas
y ojos de ámbar bello.
Sus movimientos felinos
te cautivan al instante,
silencioso y elegante
incluso en su despertar.
Es alegre, juguetón
mimoso y tierno.
Cuando te oye llegar
raudo te sale a esperar,
luego se tumba en el suelo
y se deja acariciar.
Cuando duerme se abandona,
es un placer contemplarlo
y aunque parezca dormido
basta el más pequeño ruido
para poder alertarlo.
Si acaricias su cabeza
y le hablas al oído
aunque esté medio dormido
te contesta agradecido
con un ¡miau! Que te embelesa.
Y el nombre de Bidesuco
os lo podréis explicar
porque ya desde pequeño
esconderse en el bidé
era su debilidad.
Tiene otra debilidades
no menos interesantes:
los flecos de las cortinas
las flores secas, los rollos de papel,
beber agua del grifo,
también tumbarse a mis pies.
Si con él estás jugando
y se cansa de jugar
no lo sigas intentando
porque te puede arañar.
Él es el dueño y señor
siempre hace lo que le place,
aunque tú no lo consientas…
él te cautiva al instante…
con sus muecas
con su gracia y con su testarudez.
Siempre mete la cabeza
donde la quiere meter.
¡Moraleja!
Debes de saber:
si quieres tener un gato,
que él será el Rey
y tú su esclavo.
Damiana Manrique.
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