miércoles, 8 de enero de 2014

LA POESÍA DEL MES

Lo prometido es deuda. Sigue vivito y coleando el viaje a Burgos, y en homenaje al día que pasamos y a la gente que allí dejamos como nuevos amigos, me llena de orgullo y satisfacción, publicar en esta entrada la poesía que Pilar Hernán me ha mandado y que previamente nos leyó en el Club.
Muchas gracias.


VIAJE A BURGOS

Domingo, 1 de Diciembre

las chicas del Club de lectura

             a las 9 de la mañana                           

darán comienzo su aventura.

Ramón, ofrece su coche,

también Pilar y Mariola,

y Damiana, si no nieva

se ofrece como conductora.

Ya de víspera comienzan

los móviles a sonar,

un camioncito, a Mariola

le acarició por detrás.

¡Que nadie se ponga nervioso!

traerá el coche Juan Carlos,

que venga con vestidito

y zapatitos blancos…

Dos gallos en un gallinero

nunca dió buen resultado,

 a ver si haciendo méritos

deja ya de ser becario.

-Tú, Ramón, vete delante

que nosotras te seguimos,-

 Ramón coge un atajo

que los otros no han previsto.

Y tiene que dar la vuelta,

no es cuestión de desperdigarse

y perder la comitiva

antes de emprender el viaje.

Precaución en los semáforos

para no quedar separados,

si a Juan Carlos se le cierra

a un ladito lo esperamos.

De todos es sabido

el parecido que tienen

el color naranja vivo

con el reluciente verde.

Por ello,  a nadie le extraña

que tire  p´alante Ramón

él, tan prudente en todo

cometiendo una infracción.

¿se lo salto sin querer?...

¿o fue sin querer queriendo?...

¿Fue simplemente despiste

o quiso deshacerse de ellos?

 

Nos hará de Cicerone

la amiga de Ramón, Concha,

primero, la catedral

incluido el “Papamoscas”.

Para hacer el recorrido

nos dan unas audioguías

que nos explican retablos,

claustros techos y capillas.

Cuando la visita termina

y dejamos la catedral,

se le desliza hasta el bolso

la audioguía de Pilar.

Se cree que la interfecta

sin móvil se había quedado

y pensó  ahorrarse unos duros

llamando con ese aparato.

 

En el Museo del Libro

pequeño y acogedor,

subiendo y bajando escaleras

logramos entrar en calor.

Tras alimentar la mente

hay que sustentar el cuerpo,

y tomamos un aperitivo

que resucita a los muertos.

Luego llega la comida

como apóstoles en la última cena

somos doce los comensales

que nos sentamos a la mesa.

Damiana, con sus tripas

mantiene una lucha interna,

y debe cambiar de menú

para no irse “de vareta”.

Y le sirven un arroz

con un pescaíto muy bueno,

el menú degustación…

para chuparse los dedos.

 

La cecina…deliciosa...

el revuelto…exquisito…

las láminas de bacalao

no tenían desperdicio.

Las carrilleras se deshacen,

los chipirones... tiernitos...

Isabel prueba la tarta

y se queda sin sentido.

De tanto hablar sin descanso

Ramón, se nos reseca

y se le van acumulando

los platos sobre la mesa.

Van desfilando botellas

que al momento están vacías,

si llegan a ser de vino

de allí salimos “bolingas”.

Una compañera de Concha

llega a la sobremesa,

a tiempo de cafés, manzanillas

pacharanes y hierbas.

Cuentan todas las andanzas

de nuestro Club de lectura,

y libro va, libro viene

se va alargando la tertulia.

Quedan ellas sorprendidas

del buen hacer de Ramón

“alma mater” del  grupo

y principal eslabón,

que logra mantener unidas

a un grupito de damas

y que con ellas, él se siente

como un pez en el agua.

Damiana, nos recita

un poema que ella ha escrito,

trata sobre la amistad

es dulce….bello…emotivo.

 

Hay que devolver la audioguia

antes de que cierre la catedral,

la sesión se levanta

y dejamos el restaurant.

 

Pilar respira tranquila

al ver su buena fortuna,

aún no han puesto su persona

en “búsqueda y captura”

con un letrero que diga:

“es peligrosa y cleptómana”

pertenece a una banda

todas, mujeres riojanas.

El cabecilla es un cántabro

y las dirige en sus acciones,

y un becario que no cobra

les secunda en ocasiones.

 

Entramos al museo Miro,

la exposición está llena

de oleos multicolores

que no hay dios que los entienda.

Donde el artista ve mujeres

y pájaros y mas pájaros ,

yo, garabatos más dignos

de un chiquillo de tres años,

las esculturas…mujeres

y pájaros y mas pájaros,

y yo solo veo feos adornos

de material reciclado.

No me llamó la atención

ninguna obra del artista,

y es que , de todos es sabido

que la ignorancia es atrevida.

 

Y se acabo nuestra aventura

por estas tierras castellanas,

pasamos  lindos momentos

y mas frío que en Alaska.

Al despedirnos de Concha

Y de su amiga, prometen:

-iremos a tierras riojanas

vuestro club se lo merece,

hemos  sentido envidia sana…

y pasado un día agradable…

y os devolveremos  la visita

mas bien pronto que tarde.

********

1 DICIEMBRE 2,013

1 comentario:

  1. Bravo Pilar: que agradable sorpresa tu poema y que risa que me ha dado
    Todo al detalle
    Cuanto y bueno hay en este club...

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