La entrada mensual de nuestra compañera Pilar, va a dejar de denominarse "rincón". Habrá que consensuar otra forma de llamar a este espacio que nos desborda por su grandeza, fascinación, trabajo y generosidad hacia nosotros.
Infinitas gracias y qué suerte poder leer una y otra vez esta novela tan apasionante.
ALÍ Y NINO
Desenfreno, ambición, odio, venganza, ternura
pasión, traiciones entre Oriente y Occidente
amor entre
personas de opuestas culturas
y religiones muy diferentes
BAKÚ
Hay en clase 20
musulmanes
4 armenios. 2 polacos,
3 sectarios y uno ruso
no les dejan hablar tártaro
De su comportamiento depende
que pertenezcan a la Europa avanzada
o que sigan supeditados
a una Asia subdesarrollada
Al dios de la
iglesia ortodoxa
antes del examen le rezan
aunque a la iglesia oficial del estado
solo dos alumnos pertenezcan.
Con vestiduras eclesiásticas
y una gran cruz dorada en la mano
comienza el pope una plegaria
palabras hueras, sin significado
Preside la clase un retrato del zar
de pelo rubio y ojos fríos y claros
el retrato de la zarina
hace tiempo lo quitaron
porque a los musulmanes del pueblo
incomodaba su vestido escotado
no mandaban a los niños al colegio
para no escandalizarlos
Los profesores rusos prefieren
no suspender a los musulmanes
pues tienen amigos fuertes
con pistolas
y puñales
En el uniforme que lucen
el ultimo año del bachillerato
llevan galones en el cuello
y botones plateados
Es una ciudad metida en otra
como la nuez dentro de su cáscara,
la cáscara es la ciudad nueva
mas allá de la antigua muralla.
Hay teatros, escuelas hospitales
policías calles altas y anchas
bellas mujeres de hombros desnudos
hombres codiciosos que disparan balas
Nació esta cuidad nueva del petroleo
procedente del desierto
en ella, cuando suenan disparos
siempre siempre es por dinero
En la ciudad nueva comienza
la frontera geográfica
con Europa, allí vive Nino
la futura esposa de Alí. Es georgiana
La ciudad vieja tiene casas estrechas y curvas
como el sonido de los sables orientales,
las mezquitas se elevan contra el cielo
ilumina la luna sus alminares.
Junto a la muralla luce altiva
la torre de la muchacha,
la construyó un rey para su hija
porque quería
desposarla
Cuando el padre, ávido de amor
subía volando la escalinata
la princesa, para evitar su deshonra
se arrojó por la ventana.
Corrió mucha sangre por sus callejuelas
a lo largo de los siglos
y esa sangre derramada les hace
mas fuertes valientes y aguerridos
La venganza de sangre es el fundamento
mas importante del orden estatal,
y de las buenas
costumbres,
algo que no se puede alterar.
Si mediante derramamiento de sangre
perece el miembro de una familia
deberán perder uno de los suyos
quien cometió la ignominia.
Los sabios ancianos piden
que la sangre derramada se perdone
a cambio de recompensa
pero el equilibrio se rompe
Un juez ruso imparte justicia
al otro lado de la muralla
son clementes y justos de una manera
que a nuestro pueblo no le agrada.
Los ladrones van a la cárcel
les dan azúcar y una celda aseada
la gente a quienes han robado
no sacan provecho o ganancia.
El pueblo musulmán se encoge
de hombros y aplica sus propias leyes,
según dicta la charia (la ley de Alá)
“ojo por ojo y diente por diente”.
Al llegar la noche por las callejuelas
formas enmascarada se deslizan
un destello de puñal, un grito ahogado
...y se hizo justicia
A veces de noche pasa un hombre
con un saco del que salen gemidos,
un chapoteo en el mar y el saco desaparece
ante ciegos ojos
de mudos testigos.
Al día siguiente, con sus ropas rasgadas
y los ojos llenos de lágrimas sucias
se complace de haber cumplido la ley:
“dar muerte a la mujer adúltera”.
Al fondo de la plaza se sientan los hombres
las mujeres van por agua a la fuente
solo cuando dos miradas se cruzan
nace el amor en Oriente
Tras el velo no se ve a las mujeres
pero sí sus costumbres y pensamientos,
el velo oculta su rasgos pero el alma
de las orientales no esconde misterios.
Hay 17 iglesias y 10 mezquitas
y en las cercanías numerosos santuarios,
a un santo al que perseguían sus enemigos
montado en su caballo dio un gran salto
por encima de la montañas
llegó volando hasta el otro lado.
Los devotos pueden ver hundida
la huella de la herradura de aquel caballo
un pura sangre alazán de Karabaj
joyas vivientes que duermen en cuadras
y solo en caso de guerra montan
sus dueños esa maravilla rojidorada
Alí
Tiene alfombras en la pared y libros
del saber occidental... nimiedades
inventadas por los bárbaros
para ocultar su barbarie
-Soy musulmán, de doctrina chií
si dios tiene
piedad de mi
dejará que muera en la misma calle
y en la misma casa en que nací
El mundo del bosque le confunde
está lleno de sobresaltos
la mirada se estrecha, está oscuro
el sol pierde entre las sombras sus rayos
El desierto, sencillo como un golpe de espada,
el bosque complejo como un nudo gordiano
en las montañas Alí se encuentra en casa
en los bosques, desorientado
Cinco antepasados de Alí lucharon
por el imperio del
León de Plata
cuatro perecieron en la India
solo uno regresó a casa
con la sangre de 9 de sus miembros
compraron en Shirvan sus tierras
otros por el zar dieron su sangre
en la guerra de Japón y Crimea
y en campañas contra turcos y afganos
por eso aprueban sus hijos
los exámenes de reválida aunque no sepan
diferenciar gerundio de gerundivo
-Las mujeres rusas están locas -dice Alí-
a veces engañan a sus maridos
pero dios las castiga impidiendo
que tengan mas de dos hijos.
Aún así, me casaré con Nino
sé que será una buena esposa
aunque sea tan desenfadada
tan divertida y soñadora.
Llevará ese día el vestido oriental
me será difícil llegar a su cama
pues cada puerta del largo pasillo
albergará figuras enmascaradas,
deberé poner monedas en sus manos
para que liberen el camino hasta el lecho,
al fin solos tendré que desabrochar
el corsé de cuero de la novia sujeto
por cordones atados por delante
con nudos muy complicados,
el hombre ha de demostrar dominio
de sí mismo para no cortarlos-
Nino es cristiana,
de Georgia
come con tenedor y cuchillo
gasta finas medias de seda
tiene ojos risueños y vivos.
Ama las libertades, no lleva velo
ni tiene larga y afilada nariz,
que bien que Alí no quiera obligarla
a cubrirse el rostro... O si??
A ella le complace gustar,
a él le molestan las miradas ajenas
las espaldas desnudas, cabello al viento
medias trasparentes y delgadas piernas.
Un hombre siempre quiere ver mas
cuando ve unos pechos medio descubiertos,
pero el velo protege al hombre
de estos impúdicos deseos.
En las montañas viven los espíritus
que custodian fabulosos tesoros,
en los bosques hay rocas sagradas
y fluyen sagrados arroyos.
El hombre del desierto conoce
una sola verdad que lo absorbe,
los fanáticos viven en el desierto,
en el bosque los
creadores
-Si con un musulmán me caso
Alí, mis padres se morirán,
tu padre, te exigirá que me obligues
a convertirme al islam
si lo hago, el zar
a Siberia
por apóstata me desterrará-
Llega el TÍO de Alí con su harén
para consultar en la ciudad
los mas renombrados médicos
del saber occidental
Las mujeres no tienen entendimiento
-dice- tenemos que vigilarlas
para que sobre sí y sobre los demás
no nos traigan desgracias.
No comprendo a los cristianos;
tienen las mejores armas,
los mas aguerridos soldados
y las mas productivas fábricas,
producen lo necesario
para matar al enemigo en masa
y les condecoran por ello
porque la guerra es necesaria.
Hay quien construye hospitales
repletas de camas donde sanan
a soldados enemigos y a ellos
también les conceden medallas.
Nosotros al enemigo lo matamos,
por eso Europa nos desprecia,
ellos recompensan con el mismo honor
a los que hacen cosas opuestas.
Los musulmanes vivimos gobernados
como el profeta nos ordenó,
los cristianos no hacen nada
de los que les manda
su dios.
Podemos tomar varias esposas
siempre que podamos mantenerlas,
ellos se pierden tras cualquier cosa
de cabellos largos y esbeltas piernas.
Somos nosotros los justos, y sin embargo
va disminuyendo nuestra fuerza,
mientras ellos van creciendo
y el mundo entero los respeta-
En el umbral de la vida, un padre
a su hijo debe
trasmitir
respetando las formas y en público
la sabiduría de vivir
-estamos en tierra de infieles
ser musulmán conlleva obligaciones
reza a menudo, Alí, no bebas,
mantén nuestras costumbres y tradiciones.
Trata bien a los débiles y a los pobres,
estate dispuesto a desenvainar la espada,
aunque me acosaría un gran dolor
si murieras en el campo de batalla
estate preparado a morir por dios
porque mucho me avergonzarías
si perdieras el honor
solo por conservar tu vida.
Pensar en el mañana acobarda,
nunca te metas en política,
es la mas efectiva manera
de mantener tus energías.
No perdones a los enemigos
que nosotros no somos cristianos
ya eres un adulto
-le dijo
dándome un gran abrazo-
Hasim es
un viejo enamorado
sentado en cualquier esquina lloraba
y cantaba su amor y su dolor
desde el ocaso hasta el alba
Seinal Aga es
un campesino humilde
que tenía terrenos en el desierto
pero un terremoto abrió una grieta
de la que manaron ríos de oro negro.
El dinero le perseguía
no necesitaba ser hábil ni listo,
tenía la certeza de que a tanta fortuna
tarde o temprano le seguiría un castigo.
Vivía en espera de su penitencia
como un condenado espera su ejecución,
construyó mezquitas, peregrinó a la Meca
pero su familia se desmoronó.
Su bella esposa, de 18 años
un buen día le deshonró,
vengó su honra como corresponde
de forma sanguinaria cruel y atroz.
Sus hijos le llenaron de vergüenza,
uno de ellos le abandonó,
otro, le trajo una deshonrosa
ofensa cuando se suicidó.
Ilias Beg es
compañero de Alí
y el único hijo vivo de Seinal Aga
la fiesta de fin de curso
la organizan en su grandiosa casa
Con armenios y georgianos
las muchachas rusas solo hablan
Nino luce el antiguo traje
de princesa georgiana
Said Mustafá
vive junto a la mezquita
es descendiente del profeta
ojos pequeños y rasgados
rostro picado de viruelas.
El fajín verde denota su rango
su padre es imán en la mezquita
su abuelo escribe en las plantas de sus pies
el nombre del impío califa
para pisar cada día al enemigo de la fe,
en el moharran se desgarra el pecho
hasta que le sangra la piel,
le es fácil condenar los pecados del pueblo
pues está en la tierra como de paso,
acepta el significado de su edad
es un anciano de ojos cansados.
Predica: Un hombre debe casarse
y es mejor si la elegida le gusta
los hombres listos no cortejan a las mujeres
pues solo son la tierra que ellos fecundan,
no tienen entendimiento ni alma
debe ser virtuosa y tener muchos hijos,
no es necesario que al islam se conviertan
porque no esperan ni infierno ni paraíso.
Las mujeres georgianas son parte del botín
que el profeta prometió a los creyentes
“id y tomadlo” así está escrito
en el libro de los fieles
Alí cuenta al padre su proyecto de boda,
su padre responde: te construiré una casa
con alfombras en las paredes
y hermosos caballos en la cuadra.
Lo mas importante en una mujer
es que tenga caderas anchas,
no la obligues a abrazar el islam
pero que no traiga la fe extranjera a casa,
tu eres el amo y ella tu sombra,
si está embarazada, no le pegues,
no la engañes, pues tiene derecho
a cada gota de tu semen.
Si te da un consejo haz lo contrario,
las mujeres son astutas y maliciosas,
ten paciencia cólmala de regalos
blancas sedas y piedras preciosas.
GUERRA MUNDIAL
A monarcas y príncipes europeos:
el zar ruso declara la guerra :
entre ellos Prusia, Alemania, Austria,
Hungría, Sajonia y Baviera,
Por cuestión de religión o parentesco
los distintos países toman partido
el sultán iraní y el otomano
no participarán en el conflicto
Al zar, le apoya Japón, la India
el rey de la corona inglesa,
Serbia, Bélgica y el presidente
de la república francesa,
aunque Japón reza a otro dios
y el civil que gobierna Francia
no tiene dios alguno ni puede
ser pariente de ningún monarca
-Es un asunto de sangre -piensa Kochi-
que con armas deben resolver
el Kral de Serbia
y el emperador Francisco José-
Kochi quiere ir a la guerra
porque le darán caballo y armas
quiere ver los ojos del enemigo
cubierto de amargas lágrimas
piensa: -traeré mucho dinero
me felicitarán por mi heroísmo
y si en el frente
muero
recibirán honores mi padre y mi hijo.
Los ojos le brillaban con el despertar
del espíritu de la batalla
campesinos georgianos asaltan trenes
ignorando hacia donde se encaminaban.
El príncipe Melikoven
va montado en un caballo
de hermosa y estrecha cabeza
ojos altivos, tronco delgado
piernas como de bailarina
piel rojiza con reflejos dorados
solo para entrar en combate
es el hermoso alazán
montado
En la ciudad rasgaron el aire
las campanas de las 17 iglesias
desgarrador lamento que informa
a sus fieles de la “mala nueva”
Cuando callan las campanas,
un mulá sube al
alminar de la mezquita,
“levantaos y orad” ordenó a los suyos
enfermo de orgullo y melancolía
Para Ilias Beg la guerra es una aventura
y para su compañero Mehmed Haidar
una ocasión propicia
para dejar de estudiar
Dice Alí : -peor que las expediciones
del zar en la peligrosa guerra
es algo invisible que toma las voluntades
de las personas por la fuerza.
Cuando esa fuerza invisible amenace
mi mundo blandiré
mi espada
pero hoy me quedo con Nino
ella es mi tierra y mi patria
Si miro sus oscuros ojos, siento
como la llamada de la patria a un hijo
al que un extraño por la fuerza
intenta apartar por extraños caminos-
Desaparecen los rusos, el petróleo sube
el pueblo es feliz pues está lejos la batalla
y los nombres de las ciudades perdidas
o conquistadas suenan extrañas
El mula asegura que los musulmanes
no están obligados a ir a la guerra
revistió sus palabras para convencerlo
con muchas citas de profetas
Persia no está en guerra con nosotros
mas su espada está herrumbrosa hace tiempo
nuestras hijas serán sus esclavas
nuestros hijos serán sus efebos
Alí pide a su padre tres deseos:
pasar el verano con Nino en Karabaj
tomar la espada cuando él lo decida
y poder casarse sin dificultad.
El padre está pensativo
mira a Alí de soslayo
quizás su querido hijo
todavía no esté degenerado.
Tras la opera, Alí y Nino se dirigen
a cenar con Najarayán
representan los tres pueblos del Cáucaso,
georgiano, armenio
y musulmán.
Bajo el mismo cielo nacidos,
por la misma tierra soportados,
reciben de oriente y occidente
a la vez europeos y asiáticos.
Seremos bastardos de Asia y Europa
si vencen los rusos- dice Narjarayán-
en vez de formar puente entre una y otra
perderemos iglesias, lengua y singularidad
Nino: persas y turcos desgarraron nuestra tierra
el Sah devastó el este, el oeste el Sultán
las mujeres georgianas acabaron en harenes
con el total beneplácito del islam,
los rusos no entraron solos
ellos fueron quienes trajeron la paz,
nosotros los llamamos y Jorge XII
renunció a la corona en favor del zar
Naj: los rusos quieren protegernos unos de otros
pero nosotros
sabemos defendernos
no necesitamos sus funcionarios
sus gobernadores
ni sus regimientos.
No les perdono que se incautaran
de los bienes de la iglesia armenia
y sentado en esta terraza
se está mejor que en las trincheras
Alí: yo soy musulmán y vosotros cristianos
sois el botín que
Alá nos prometió
no hicimos sino seguir los preceptos
que nuestro dios nos exigió.
El sultán del imperio otomano
declara la guerra al mundo de los infieles
trasladan sus tropas para liberar del yugo
de Rusia e Inglaterra a los creyentes.
Al declararse la guerra santa se convierte
Alí en héroe, porque el musulmán
nunca debe levantarse en armas
contra su hermano, el sultán.
Los que antes le llamaban cobarde
cantan alabanzas de su sabiduría,
ahora bajan la mirada a su paso
también ahora su padre le admira.
Pero el hombre sabio debe permanecer
indiferente ante la alabanza o la censura
para formar un ejercito de creyentes
sus tropas se unirán a las turcas.
Para que su hijo se quede en Bakú
paga un dinero Seinal Aga
se mudó el alma de la gente, ahora nadie
tiene prisa por coger las armas.
Sus amigos ahora envidian a Alí
porque no juró fidelidad al zar,
nadie les obligó a prestar juramento
pero hoy querrían dar marcha atrás.
Aunque los turcos son suníes sus corazón
anhelan que Enver tome la ciudad,
con ellos comparten lengua y familia
por sus venas
corre la sangre de Turán.
Mejor morir bajo la media luna del califa
que luchando contra turcos apoyando al zar,
Persia queda al margen del conflicto
sigue herrumbrosa la espada de Irán.
Alí quiere casarse con Nino
y busca el beneplácito del padre
-es suerte para una mujer-le responde-
desposarse con un hombre de tu carácter.
Pero aún sois muy jóvenes
profesáis diferente religión,
esperaremos al final de la guerra
para continuar esta conversación.
El matrimonio se basa en la confianza mutua
deben apoyarse y tenerse respeto,
los dos deben tener el alma libre
el mismo mando y los mismos derechos.
Alí promete que no tendrá un harén
ni obligará a Nino a llevar velo,
gracias a la intervención de Najarayán
se casarán cuando Nino termine el colegio.
Con el botín de guerra de grandes batallas
llegan camellos desde el desierto
por la ciudad pasan prisioneros turcos
con uniformes grises, magullados y harapientos.
Los llevan a la isla de Narguín
en unos sucios barcos costeros,
mueren allí de hambre, disentería, añoranza,
o escapan y perecen en los salinos desiertos.
La guerra, antes lejana
ahora la sienten al alcance de la mano
del oeste llegan trenes llenos de heridos
del norte, trenes repletos de soldados
Alí pasa una semana en Tiflis
conociendo a la familia de Nino,
prisionero de príncipes georgianos
del cordero, del queso y del buen vino.
Son los georgianos abiertos
y como corzos nobles extraviados
en la selva de la comunidad
de los pueblos asiáticos.
No hay otra raza de oriente con tal gracejo
tan llena de alborozo y elegancia,
tan borracha de alegría de vivir
y del sano placer de no hacer nada.
Su hospitalidad es muy diferente
de la acogidas que
brinda su tío,
en Teherán se bebe té fuerte
se recita poesía y se habla de eruditos.
Aquí beben, bailan ríen, son flexibles
y duros como muelles de acero,
para hacer frente a la hospitalidad georgiana
los primos de Nino van tomando el relevo.
Hace años salió un rey con su halcón
iba de caza persiguiendo un urogallo,
por el bosque corre agua azulada
los dos animales perecen ahogados.
El rey fundo la ciudad de Tiflís
en torno a los azufradas aguas,
allí llevaron al indispuesto Alí
para recuperarle de su resaca.
Un masajista enjuto como un esqueleto
y con los ojos de nirvana,
va desnudo y lleva turbante
sobre su cabeza afeitada,
le tumbó boca abajo
y salto sobre su espalda,
se paseó por ella tan ágilmente
que parecía que bailara.
Se oyó el crujir de sus huesos
le retorció piernas y brazos,
clavó los dedos en su carne
como hirientes garfios afilados.
Visitan la catedral de Sión en Tiflís
en ella Nino pide perdón
por su amor con
Alí, temiendo
que la santa no acepte su relación.
No se ven mujeres con velo
ni se siente los aires de Asia
es otro mundo de anchas calles
y de sencillas y rectas almas
Nino es otra cuando viene Georgia
no hay beatos como Said Mustafá
ni lúgubres compañeros
como Mehmed Haidar.
Ésta tierra está entre los brazos
de una especie de
tenazas ardientes,
pasaron turcos, persas, árabes, mongoles
ningún pueblo les poseyó totalmente.
De occidente vino Santa Nino
con su cruz de madera de viña
y a occidente pertenecen
aunque los musulmanes lo recriminan.
Mis hijas llevarán velo-piensa Nino-
y si la espada de Irán se vuelve a afilar,
mis hijos y nietos asolarán Georgia
y yo lo deberé aceptar.
Alí me quiere por mis ojos, mi nariz mi boca
pero, podrá algún día amar mi alma?
Tengo miedo de su mundo, y sin quererlo
le reprocho el Gengis Kan y sus campañas.
Soy un trocito de la Europa que él odia
y es estúpido responsabilizarle
a él de todos los georgianos
que asesinaron los musulmanes.
Cuando al bazar llega Nino
termina su desconsuelo,
es un laberinto de colores
donde se reúnen todos los pueblos,
cocineros, persas, rusos hindúes
adivinos kurdos,
vendedores armenios
San David vive en un monte
disfrutando de su retiro
La hija de un rey se unió a un príncipe
viviendo un amor prohibido.
Viéndose abandonada y sola
acusa de su embarazo al santo
el rey manda que lo detengan
y lo lleven a palacio.
San David con su bastón toca
el vientre de la princesa
la voz del niño dijo el nombre
de quien cometió la ofensa.
La princesa parió una piedra
de la que frotó una fuente sagrada
las mujeres que quieren tener hijos
se sumergen en sus aguas
Alí debe quedarse en casa
porque vendrá gente importante,
no puede ir a la opera con Nino
y pide a Najarayén que la acompañe.
Empiezan a llegar los invitados,
son los príncipes petroleo,
toman té, comen dulces
y hablan de negocios,
de sus casas, de caballos, de jardines,
del dinero que pierden en los casinos,
de lo débil que saldrán del combate
gane quien gane este conflicto.
A la casa Romanov y a la casa Osman
les piden lo mismo: independencia
mas cerca de la libertad estarán
cuanto mas se debiliten sus potencias:
-tenemos el petroleo, y el vencedor
nuestros favores
deberá mendigar
mientras, edificaremos
hospitales
demostrando así nuestra sensibilidad-
Aga Musa Nagui es
babista y asegura:
los rusos exterminan a los turcos
los turcos a los armenios,los armenios
a nosotros y nosotros a los rusos
Cada pueblo tiene un dios distinto,
lo creen único y el mejor,
pero por la voz de todos ellos
se revela el mismo dios.
Por eso reza a Confucio, a Buda
o a Mahoma, no hay negro ni blanco
porque unos estamos en otros
y no debemos destrozarnos.
Mehmed: Si en vez de disparar contra suníes
regamos nuestros campos sedientos
y construimos numerosas mezquitas
nos dejaran en paz los extranjeros.
Ilias Beg le responde irónico:
y después prohibimos leer y escribir
nos alumbramos con velas
y elegimos rey al mas tonto del país.
Mehmed: nuestros antepasados construían acequias
en vez de pozos de petróleo, y ellos
en vez de permitir que les robaran
estafaban a los extranjeros
RAPTO
Najarayán ha raptado a Nino
se casarán en Suecia,
van camino de Markadán
Alí siente un zumbido en la cabeza.
Con puñal al cinto y revólver monta
el alazán del comandante del regimiento,
va al encuentro de los fugitivos
galopando como el viento.
Najaraiyán:Yo la amo, princesa
de mi destino soy dueño,
Alí es un bárbaro atrapado
en hechizos de desiertos.
Alí pronto les da alcance
por los caminos de Asia se va despacio,
las carreteras no están asfaltadas
y los caballos cabalgan rápidos.
El pecho le martilleaba, lanzó el puñal
la luna mira con semblante de muerte,
sus manos rodean su cuello del armenio
sus pies aprietan contra su vientre.
Los dientes se hunden en su blanca piel
de la garganta de Alí sale un grito ahogado,
es el ataque del lobo gris
fiero y mortal, pero sin golpes bajos.
La cara de Najarayán muestra el miedo
su boca esta desgarrada y oscura
siente Alí que tiembla, alza el puñal
su trastornada cara mira a la luna.
La vida de Nino le pertenece
puede tomarla o perdonarla,
¡mátala! Dicen sus amigos
Nino no llora ni dice nada.
Melikov sacrifica al caballo
cuando le cuentan lo que ha ocurrido
y pide su traslado al frente
a saciar su rabia contra el enemigo
Ilias Beg y Mehmed Haidar
logran esquivar el consejo de guerra
pero los mandan a primera linea
¡se terminaron sus prebendas!
Solo el matrimonio podrá salvar a Nino
porque ha sido deshonrada,
Alí, expuesto a una venganza de sangre
se refugia en las montañas.
Aul es un pueblo de Daguestán
con enormes rocas y peñascos secos,
entre las rocas se pierde y se retuerce
en el abismo un sendero estrecho.
Los patios de las cabañas de arriba
son para las de abajo, las azoteas,
su interior sencillo y oscuro
está cubierto de esteras.
Tumbado en el patio Alí mezcla
granos de hachís con hojas de tabaco,
hay incoada contra él en el pueblo
una causa por asesinato
-¡que no se deje ver por la ciudad !-
sentencio el comisario
cuando el padre de Alí le muestra
un fajo de billetes del banco.
Arslan Aga, compañero de colegio
va a visitarlo y le dice:
todo Bakú sabe donde te encuentras
pero nadie revela tu escondite-
Le pide Alí que le ponga al día
de lo que en el pueblo ha ocurrido,
la casa de Najarayán
incendiaron tus amigos,
a Ilias Beg le han condecorado
Mehmed Haidar está herido,
todos los rusos de Baku
están enamorados de Nino.
Solo se relaciona con ellos
tiene un perro al que maltrata,
unas veces le llama Alí
otras Najarayán le llama.
No sabe como ocurrió, pero un día
allí estaba Nino cuando el se levanta,
la trajo Said Mustafá para evitar
que el hachís a perder lo echara.
-Dicen que me quieres matar
y he venido corriendo-...
De repente desapareció todo
lo visible y lo manifiesto.
Solo quedó miedo, alegría, curiosidad
y un dolor súbito y cortante,
y unos ojos que lo reflejan todo
ojos georgianos húmedos y grandes.
Se acurrucó bajo las plumas
escondiendo el rostro entre su pecho,
era como la llamada de la tierra sedienta
cada movimiento de su delgado cuerpo.
-No me raptó contra mi voluntad
me equivoque creí hacer lo correcto,
soy culpable y merezco la muerte
me aterraba tu odio y tu desprecio.
Ahora me voy, iré a Moscú
Alí pide un mulá y dos testigos
él aceptó una mujer deshonrada,
ella, a un prófugo con enemigos.
Nino va con el cántaro al arroyo
va descalza y en fila india
pasaba sin mirar a su esposo
y él apartaba la vista.
Entendió Nino la ley de la montaña
que impide mostrar en público su afecto,
dominó el arte de comer con las manos
y de sentarse en el suelo
Arslan le dice en una carta:
los policías están en la cárcel,
los reclusos dejaron la prisión
y pasean por las calles,
ya no hay soldados
el gobernador huyó de la ciudad
cansado de gobernar malas gentes
ya no debemos obediencia al zar.
Aún no sé como llamar a esta situación,
ayer apaleamos al director del colegio
y nadie nos lo impidió,
¡ya puedes volver al pueblo!
Bakú era una ratonera con desertores
rusos a las puertas de la ciudad,
de todas tendencias políticas, ávidos
de botín y dispuestos a atacar.
Nino agarró mi rostro, me beso
llena de entrega, placer y miedo
-el niño se llamará Alí- estaba sumergida
en otro mundo al que solo ella tenía acceso.
Los armenios se alían con los rusos
exigen a Bakú que entreguen las armas
que Nino se niegue a marcharse,
le enorgullece aunque le lleve la contraria.
Sube a la muralla con la ametralladora
las campanas rompen el silencio
suenan los primeros disparos
llegan al cuerpo a cuerpo.
EXILIO
La batalla está perdida
su tierra se ha vuelto europea,
abandonan Azerbaiyán
se van exiliados a Persia.
Para vigilar y proteger a la comitiva
el gobernador manda un mensajero,
debe proteger a la mujer desnuda
porque Nino no lleva velo.
La puerta de la ciudad luce
un gran colorido en sus azulejos,
bajo ella, mendigos con espantosas úlceras
derviches y peregrinos harapientos,
cantan el esplendor de la ciudad imperial
que les prohíbe pisar su suelo,
tumbados entre polvo y escombros
en sus voces hay nostalgia y duelo.
El eunuco del palacio de Shimrán
encuentra en Nino a una salvaje,
el limará sus asperezas
enseñándole buenos modales.
Vigilará el buen estado de su boca
para que no tenga mal aliento,
pintará sus uñas de rojo,
lavará sus axilas
y depilará el vello.
En el bazar de
vías estrechas
Alí compra frutos secos y rosas
sus criados cargan con el esplendor de Oriente
alfombras, pañuelos de seda y joyas.
Alí es feliz en el palacio, pero Nino
que en Daguestán estaba satisfecha,
aquí fracasa ante las decorosas reglas
del solemne protocolo persa.
No sabe como convencerla
de que la mujer de un kan
no puede pasearse sin cubrirse
por las calles de la ciudad.
-Me despreciaría a si misma si vistiera esas ropas-
Alí encarga un coche de caballos cerrado,
para pasear juntos protegidos
por sus cristales esmerilados.
En la plaza, no le permitió que bajara
del coche a saludar al padre,
Nino está triste y Alí le compra
medio bazar para hacer las paces.
En una fiesta, un representante
de Persia en una corte europea,
asegura que en este mundo
solo hay bárbaros y persas.
Con los ingleses nos complementamos
ellos aman el trabajo,nosotros la belleza,
ellos el combate, nosotros la calma,
protegerán ellos
nuestras fronteras.
Construirán carreteras y edificios
incluso nos pagarán por ello,
¿pretenden proteger su cultura
o sus copiosos pozos de oro negro?
Construiremos un gran edificio
donde el alma de Asia alojaremos,
y en la mas bella caligrafía cúfica
escribiremos “Museo”.
Ahí estaba Asia, que por miedo
bajaba ante Europa sus armas,
Irán agonizaba un
poco
pero lo hacía con elegancia,
Ninguna promesa es suficiente
para que Nino sonría de nuevo
las estrellas persas como piedras preciosas
brillaban en el alto cielo
Cuando el eunuco intenta pintarle
las uñas sale
volando el cuenco,
le abofetea si intenta revisar su boca
ya no se atreve a depilarle el vello
-Es extraña -se
queja dolido-
para proteger al niño no lleva amuletos
si lo que nazca es una hembra
no será por mis tropiezos,
al lavarse los dientes sangran sus encías
porque utiliza
duros cepillos,
tiembla cuando la toco, como poseída
por un espíritu pérfido y maligno,
dobla su cuerpo hacia atrás y adelante
como si no tuviera huesos,
quizás adora a una deidad desconocida
y pretende que yo imite sus movimientos,
temo por sus huesos y por mi alma-
Alí no puede
prescindir de su trabajo
solo un eunuco puede vigilar a las mujeres
pues carecen de deseos y no pueden ser sobornados
El ancho puente que une Irán
con la guerra está bloqueado,
con alambre de espinos
ametralladoras y soldados.
Cual ratón en su casa se esconde
Irán en su resguardada calma,
nadie debe alcanzar la zona
donde ignoran la poesía y disparan.
El mes de Moharrán está dedicado al duelo,
pues en él murió Huseín, nieto del profeta,
por eso todos los creyentes
están llamados a
hacer penitencia.
Deben hostigarse, salir a la calle
y en el dolor de la mortificación,
se revela a los desorientados el camino
de la gracia y el placer de la redención.
Se avergüenza Alí de estar sentado
mientras su pueblo se desangra,
Mustafá dice: lucha en Moharrán como
Ilias Beg lo hace en Ganja.
PROCESION
Delante, con túnicas de luto negro
y sus espaldas descubiertas
van los penitentes, llevando
en sus manos pesadas cadenas.
Levantan la mano a ritmo de tambores
las cadenas muerden sus hombros sangrientos,
detrás, en ancho círculo, dos pasos delante
y uno atrás van todos repitiendo.
Sus gritos retumban en la calle
golpean con puños
prietos,
con una fuerza inusitada y sorda
sus abiertos y velludos pechos.
Les siguen los descendientes del profeta
con cabeza gacha y fajín verde,
propio de su rango, tras ellos
con túnicas blancas de la muerte,
van los mártires del Moharrán
sus rostros son sombríos, taciturnos
con cabeza afeitada y en sus manos puñales
parecen navegar por otros mundos.
Los puñales refulgen al caer
sobre los cráneos afeitados
sus túnicas se cubren de sangre,
un esbozo de sonrisa juguetea en sus labios.
Bajo la ventana de Alí pasó la bandera,
entró en la armonía de los lejanos gritos,
escucha el sordo retumbar de los tambores
se sintió parte del profuso gentío.
Caminaba entre ellos con los puños cerrados
contra su pecho descubierto golpeaba,
alguien puso una cadena en sus manos
y percibió el dolor en su ardiente espalda.
Grito: Shah-ssé... Shah-ssé, delante
un derviche de cara fatigada
se le pueden ver las costillas
bajo su piel desgarrada.
Pasan ante edificios gubernamentales
en sus mástiles lucen banderas negras,
la fila de antorchas parece un río
en el que se reflejan las estrellas.
Al ver a Alí, Nino
rompe en sollozos
le temblaba todo el cuerpo,
una lágrima clara gotea de la pestaña
resbalando por su rostro indefenso.
El cónsul holandés la invitó a su casa
para mostrarle una fiesta salvaje
la mas bárbara y cruel de todo Oriente
la “orgía de los
flagelantes”
Oyó el tamboril, se sintió mal
al ver aquellos rostros sanguinarios
sintió vergüenza de ser la esposa
de un salvaje tan fanático.
A Alí le cuesta mantenerse en pie
pues ve el abismo que los separa
Nino, consciente de su deber
le da ungüento en su maltrecha espalda.
-No puedo evitar odiarte -dice Nino-
odio este país y a sus gentes extrañas-
pero su destino dependía de los regimientos
que marchaban hacia Bakú para liberarla.
FIN GUERRA
Enver ocupó Bakú. Los últimos
defensores de la ciudad cuentan,
que la bandera de la media luna blanca
ondea sobre la vieja ciudadela.
Vuelven al hogar, Nino radiante
tiene carta blanca para amueblar la casa,
pide muebles europeos, colores claros,
en lugar de divanes encarga camas.
A Alí le duele pisar las alfombras
que Nino coloca en el suelo,
solo le queda de su antigua vida
la azotea con vistas al desierto.
Pasea por las calles, emocionado
pues ahora su país es independiente
siente que ama el nuevo escudo
los uniformes, cargos y leyes.
Las diferencias entre suníes
y chiíes habían olvidado,
y habían estado dispuestos
a dar su vida por el califa otomano.
Se pueden introducir reformas
dice irónico Said Mustafá
comer cerdo y beber vino
y seguir siendo un buen musulmán,
pero a las puertas del paraíso
el arcángel no querrá creerlo.
Los rusos pasan tímidos, y los antiguos
profesores le saludan con respeto.
Los oficiales están consternados
porque el ruido de la ciudad
había ahogado el tronar de los lejanos
cañones de la guerra mundial
El ministro otomano sube al acorazado
“Agamenón” a firmar el armisticio,
hay lágrimas en sus ojos,
los rostros de los
turcos están rígidos.
Como un siniestro canto fúnebre
suena la canción del imperio de Turán,
en edificios oficiales arriaron la bandera
de la Santa Casa de Osmán.
Salieron de la ciudad los convoyes, dejando
tras de si la imagen onírica de las mezquitas,
de los aireados
palacios del Bósforo,
y de un hombre enjuto que era califa
y que llevaba sobre sus hombros
el manto del adorado profeta,
días después surgieron los primeros barcos
con tropas de
ocupación inglesas.
Alí se asombra de que el primer ministro
se preocupe por su mujer
descuidando las buenas costumbres
le pregunta si Nino domina el inglés.
Alí sabe lo que quiere, le responde:
-mi casa estará lista en una semana-
sabe que el país anda escaso de europeos
con dominio del inglés y propia casa.
Le nombran agregado del departamento
de la Europa occidental,
sintió Alí que a un viejo y fiel amigo
acababa de traicionar.
Daban apretones a manos inglesas,
oficiales y funcionarios se inclinaban
ante Nino rozándola con sus dedos
sus ojos recorrían su desnuda espalda.
Apartó Alí la mirada, Nino era
georgiana y cristiana estaba destinada,
a entregar sus ojos, sus manos
y su espalda a las ajenas miradas.
Un oficial ingles dice: -tiene usted
mujer preciosa y encantadora casa-
solo las consideraciones políticas
le libraron de una bofetada.
Nino trabó amistad con el ministro
de Asuntos exteriores y lo agasajaba,
cuchicheando a escondidas
por los rincones de la casa.
La construcción de un nuevo estado
iba a plena marcha,
un mensajero trae el periódico
acompañado de una carta.
Último nombramiento: ha sido destinado
a nuestra delegación en París
con idénticas funciones que las actuales
Alí Kan Shirvanshir.
-Ninguna ley puede obligarme
a dejar mi tierra durante años-
Nino esta pálida y triste- ¿porqué no?-
dice mientras le tiemblan las manos.
-Amo la ciudad, amo el desierto
y la azotea sobre mi cabeza,
amo la vieja muralla
y las mezquitas en sus callejuelas,
lejos de oriente me ahogaría
como un pez fuera del agua,
me sentiría a merced de un arbitrio
de gente para mi extraña,
allí no esta Said Mustafá
no hay mezquitas ni murallas,
de vez en cuando necesito
recrearme en el
alma de Asia,
antes o después, en un carnaval
o en un baile empezaría a odiarte,
no quiero entrar en un mundo ajeno
aquí nací y aquí voy a quedarme.
Viajaremos cada año a Europa
nos quedaremos todo el verano
sé que acabo de destruir tu sueño
pero no soy ningún tirano,
quiero vivir en la tierra
a la que pertenezco
me quedo en mi ciudad asiática
aunque mis hijos serán europeos-
La niña se llamó Tamara, nombre
común entre cristianos y musulmanes,
Alí no entendía que su padre
tratara de consolarle.
Nino se porta con su esposo
de forma cruel y arrogante,
porque un hombre no puede parir
amamantar ni lidiar con pañales.
Se van de Azerbaiyán los ingleses,
Europea reconoce su independencia,
pero los apoyos naturales están
debilitados, Turquía y Persia.
Desde el norte les empujan los rusos
ambicionando el petróleo,
en el ministerio redactan tratados
para pactar con rusos blancos y rojos.
Las tropas de Bakú marchan a frenar
las rebeliones de la frontera con Armenia,
el padre de Alí abandona Azerbaiyán
se va con su hermano a Persia.
Los padres de Nino se van a Georgia
ellos a Ganja entre viñas y huertos,
allí, el lecho de un río seco separa
el barrio musulmán del armenio.
Comienza la ofensiva en la frontera norte
llegan de Jalama trenes repletos
de soldados rusos que cercan Bakú
y se rinde nuestro parlamento.
En el puente que separa armenios de musulmanes
hay soldados dispuestos a disparar,
en el balcón de la sede del gobierno
antorchas iluminan la bandera de Azerbaiyán
Alí convence a Nino de que se vaya
el tren surgió de la oscuridad
como un monstruo malvado,
ella le dio un beso fugaz.
Hablan de parlamentarios detenidos
y de ministros asesinados,
cadáveres atados a una piedra se hunden
en las profundidades del mar Caspio.
Arslan Aga está aterrado
se siente como un cobarde,
pero quiere luchar por su patria
y determina quedarse.
Alí se sienta tras la ametralladora
las cartucheras
entre las manos,
como hilera de rosarios inquietos
poco a poco se le van resbalando.
Las trompetas tocaron al ataque,
los rusos corrían por la plaza,
echaban la rodilla al suelo
apuntaban y disparaban.
Eran miles y el débil aullido
de la ametralladora resonaba,
como un llanto solitario e impotente
en el concurrido puente de Ganja.
Se abrió la camisa, descubriendo su pecho
su amigo Arslan ya era un cadáver,
le fue posible morir por la patria
aún siendo un timorato cobarde.
Alí esta sentado a la sombra
de los muros de la mezquita
a la República de Azerbaiyán
le quedan pocos días de vida.
Quiere dormir hasta que el toque de trompeta
le llame para ir de nuevo a su puesto,
a ese río donde sus antepasados
dieron su vida por la libertad del pueblo.
Ilias Beg encuentra el cuerpo
de Alí en el río seco, ya sin vida
como el mas valioso de los tesoros
lo enterró en el patio de la mezquita.
Es la vida como un tablero de ajedrez
hecho del día y la noche
donde al destino le gusta a menudo
divertirse con los hombres
La vida de Alí finalizó
al agotarse la vida de su república
una bella historia de amor
que traspasó fronteras y culturas